Arriba en la colina, al otro lado del lago azul, ahí es donde tuve mi primer rompimiento. Todavía recuerdo cómo todo cambió cuando mi padre dijo: No te preocupes, no te preocupes hijo ve al cielo, el tiene un plan para ti.
Después de un tiempo, conocí a una chica y la relación con mi padre fue disminuyendo. Se descartó el mundo, pensé que nunca volvería a verle, era tan joven que no me di cuenta de lo importante que era. Pienso en el de vez en cuando, aunque todavía escucho la canción que me recuerda cuando el cantaba allá en la colina sobre el lago azul. Siempre quise volver a tener aquella relación pero como siempre dicen "hay que darle al tiempo algo de tregua para perdonar".
Ahora, ya no es lo mismo, la relación de padre e hijo con el tiempo se ha perdido y tuve que encontrar a otros o a otras que pudieran hacerme feliz.
lo que eramos.
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